En el blog de la semana pasada comentamos el uso de los juegos serios y los entornos virtuales de aprendizaje multi-usuario. Esta semana nos centraremos en las razones por las que este tipo de juegos son efectivos, tanto en el aprendizaje de contenidos y habilidades concretas, como en la formación en valores.
Además de ser motivadores por el propio hecho del aprendizaje en sí, es evidente que forman parte de las prácticas educativas informales que usan los niños fuera de la escuela, y eso influye también en su efectividad. Los juegos concretamente ofrecen además pruebas constantes para superar fases con la posibilidad de obtener feedback a tiempo real. De esta forma, uno de los aspectos más interesantes de este tipo de herramientas es que el único posible progreso del jugador/aprendiz sea a través del aprendizaje.
Se ha demostrado en varios estudios que el uso de estas herramientas ayuda a internalizar la conciencia de la secuencialidad de nuestros actos, pues construir conocimiento a través de la interacción con otros fomenta el trabajo en equipo y mejora habilidades cognitivas y psicomotrices (la coordinación entre vista y manos), además de desarrollar el pensamiento y la capacidad para resolver problemas.
Por último, cabe destacar las posibilidades integradoras de este tipo de herramientas que permiten que alumnos más tímidos se involucren más activamente en interacciones con sus pares y maestros al usar un avatar.
Para acabar os detallamos un par de juegos especialmente dirigidos a alumnos con necesidades educativas especiales:
- Este navegador, Zac Browser, proporciona a niños con autismo infinidad de juegos para ayudar a familiarizarse con la navegación por internet.
- Este estudio de unos investigadores de la Universidad de Granada propone el desarrollo de aplicaciones para tableta que usan juegos para mejorar las competencias básicas de niños con Trastorno de Espectro Autista y con síndrome de Down.
Esperamos que la contribución de esta semana os haya resultado de utilidad.
